Afirman los expertos que el rude boy es el primitivo skinhead, que viste de forma elegante imitando a sus héroes de las películas de gángsters, como harán poco después los mods, antes de afeitar sus cabezas y entrar en contacto con partidos políticos de extrema derecha.
En 1962 Jamaica consigue la independencia de Gran Bretaña y se vive una etapa de fiesta en la que musicalmente se desarrolló el rocksteady proveniente del ska y posteriormente el reggae (la palabra reggae se empezó a utilizar gracias a la canción de Toots and The Maytals llamada Do the Reggay que, según explicaciones del propio Toots, se refiere a la regular people, la gente normal de a pie, la gente de la calle, el concepto de clase obrera posteriormente popularizado por los skinheads).
Durante esta época multitud de jóvenes jamaicanos emigran a Gran Bretaña para conseguir trabajo y con ellos transportan su música, ya convertidas algunas canciones en auténticos himnos rock, como 007 de Desmond Dekker, que consiguió colarse en los primeros puestos de las listas inglesas, además de lanzar el fenómeno rudeboy por todo el continente (menos en España, aquel entonces se bailaba La chica ye-ye).
Diario de un Skin
Antonio Salas
En 1962 Jamaica consigue la independencia de Gran Bretaña y se vive una etapa de fiesta en la que musicalmente se desarrolló el rocksteady proveniente del ska y posteriormente el reggae (la palabra reggae se empezó a utilizar gracias a la canción de Toots and The Maytals llamada Do the Reggay que, según explicaciones del propio Toots, se refiere a la regular people, la gente normal de a pie, la gente de la calle, el concepto de clase obrera posteriormente popularizado por los skinheads).
Durante esta época multitud de jóvenes jamaicanos emigran a Gran Bretaña para conseguir trabajo y con ellos transportan su música, ya convertidas algunas canciones en auténticos himnos rock, como 007 de Desmond Dekker, que consiguió colarse en los primeros puestos de las listas inglesas, además de lanzar el fenómeno rudeboy por todo el continente (menos en España, aquel entonces se bailaba La chica ye-ye).
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