... Libre, moderno y circunstancialmente vanguardista, no se podría explicar el arte de nuestra época sin atender a una de sus características más revolucionarias y esenciales: la de que es ya por definición un arte público, es decir, un arte concebido, ejecutado y dirigido para el consumo anónimo, para el mercado. Muy significativamente, el mecanismo que hizo posible el encuentro del arte con el público, el de las exposiciones temporales, fue creado en el siglo XVIII y no ha parado de extenderse desde entonces. Fue por eso por lo que el pensador Walter Benjamin dictaminó que, en el arte contemporáneo, lo exhibitivo había acaparado de tal forma el sentido de la obra de arte que ésta ya carecía de “aura”, ese resplandor sagrado que tradicionalmente la enaltecía como objeto de culto.
... Por lo demás, que hoy todavía discutamos qué es arte, sabiendo además que no llegaremos ya probablemente jamás a ninguna formulación dogmática definitiva al respecto, no nos priva de la experiencia y del saber derivado a partir de la historia de esta aventura, es decir, que quizá no sabemos adónde vamos exactamente por la senda del arte actual, pero eso no significa que estemos ciegos.
El Arte Contemporáneo
Francisco Calvo Serraller
... Por lo demás, que hoy todavía discutamos qué es arte, sabiendo además que no llegaremos ya probablemente jamás a ninguna formulación dogmática definitiva al respecto, no nos priva de la experiencia y del saber derivado a partir de la historia de esta aventura, es decir, que quizá no sabemos adónde vamos exactamente por la senda del arte actual, pero eso no significa que estemos ciegos.
El Arte Contemporáneo
Francisco Calvo Serraller
No hay comentarios:
Publicar un comentario